Jéssica de León subrayó que “Sevilla es pionera a la hora de poner en orden el caos que tenían en sus 108 barrios” y agregó que “el alquiler vacacional es una actividad que ha venido para quedarse, una modalidad que también interesa a Canarias, a todas las ciudades, pero evidentemente hay que tener una planificación, gestión y disciplina urbanística”.
La consejera recordó que la implantación de pisos turísticos en cualquier barrio o territorio debe realizarse a través de la planificación urbanística, una competencia de los Ayuntamientos. En este sentido, elogió “la responsabilidad de la ciudad de Sevilla, que no ha mirado hacia otro lado, no ha renunciado a sus competencias y está tratando de reconducir la situación en beneficio del interés general, el derecho a la vivienda digna a precios asequibles, y en beneficio, también, de su atractivo turístico, puesto que la adecuada planificación permite conservar la identidad del destino y su cultura”.
De León subrayó que en Canarias tres municipios han acometido ya esta tarea -La Palmas de Gran Canaria, Pájara, y Granadilla de Abona-, mientras que en el resto de España se está realizando en grandes ciudades para evitar las zonas de estrés turístico, como Madrid, Palma de Mallorca o Málaga. En este sentido, la consejera apeló a la necesidad de colaborar entre administraciones para ordenar de forma sostenible el fenómeno.
El director general de Ordenación, Formación y Promoción Turística de Canarias, Miguel Ángel Rodríguez, explicó que “hemos compartido nuestro anteproyecto de ley de uso turístico de la vivienda con lo que ya vienen desarrollando en Andalucía y también en la capital, en Sevilla, y no nos diferencian muchos trámites. Aquí su ayuntamiento ha decidido ordenar esta actividad y que sea el pleno de la corporación municipal el que decida cuántos pisos turísticos pueden establecerse en cada barrio, dónde y cómo, mismo ejercicio que estamos haciendo en Canarias y que se habilite un máximo del 10% en los barrios, porcentaje que coincide con el nuestro, o que los barrios y zonas tensionadas no puedan crecer en volumen”, explicó.
En el caso de que las corporaciones locales no planifiquen en un plazo de cinco años, la Ley regional establece medidas de obligado cumplimiento, entre las que destaca que se podrá destinar un máximo de un 10% del municipio a pisos turísticos. “Un 10% que coincide con el porcentaje que se ha establecido en Sevilla”, apuntó De León. “Lo que esta visita nos pone de manifiesto es que la colaboración interadministrativa entre Gobierno, Ayuntamiento, -Diputación en este caso-, pero también Cabildos es necesaria y que esta actividad tiene una forma de regularse que no es distinta en Canarias que en el resto de España”, concluyó.
Por su parte, Juan de la Rosa explicó que Sevilla va a ser la primera ciudad de Andalucía que regule las viviendas de uso turístico, después del decreto de la Junta de Andalucía que entró en vigor el pasado mes de marzo. “Ha sido un año de trabajo duro en el que hemos elaborado un estudio sobre pisos turísticos que nos permite limitar este tipo de alojamiento, tal y como se aprobó en el Pleno del pasado 17 de octubre”.
“Estamos empezando a limitar desde Sevilla zonas saturadas como son El Casco o Triana, donde no entrará ni una vivienda de uso turístico más, todo esto se ha realizado de forma complementaria con la Junta de Andalucía. También elaboraremos informes que se revisarán cada tres meses a través de una mesa de seguimiento, y otras medidas como declaraciones responsables que se verificará periódicamente. En definitiva, establecemos más control y firmeza en la regulación del turismo en la ciudad de Sevilla”, concluyó.