El grupo socialista del Cabildo define como “desolador” el panorama que están dibujando en Fuerteventura el presidente Sergio Lloret y sus socios de gobierno, CC y PP, sumidos en una fiesta interminable de propaganda mientras huyen hacia adelante y exponen constantemente su espectacular incapacidad para gestionar lo ya planificado y la ausencia total de proyecto de Isla, sin voluntad política ni liderazgo ninguno, aunados solo bajo la premisa de mantenerse ellos en el poder, como sea y a cualquier coste.
Hasta la fecha la gestión del pacto de las derechas nacional y nacionalista se salda con un presupuesto de la Corporación con un nivel bajísimo de ejecución, por debajo del 35%, y las cuentas del año próximo sin presentar. Los grupos de la oposición no hemos sido convocados aún a ninguna comisión ni mesa de trabajo para conocer o debatir nada al respecto lo cual es del todo inusual y nos da a entender que no pretenden consensuar nada, quizás porque tampoco tienen nada que ofrecer y finalmente harán lo único que saben hacer que es aplicar su rodillo.
Haciendo un breve repaso al estado de ejecución del presupuesto 2021 cuando ya debería estar concluyendo y justificándose, observamos que prácticamente ninguno de los grandes proyectos de inversión en infraestructuras e innovación ha sido desarrollado ni tampoco avanzan mas allá de la propaganda y las declaraciones de intenciones, están todos en la gaveta junto a los planes de generación de empleo y la promoción turística, las ayudas a las pymes y autónomos y todas las grandes partidas que se diseñaron para la recuperación socioeconómica de nuestra Isla.
Resulta paradójico y muy ilustrativo observar que los componentes del pacto que gobierna hoy la Corporación Insular son los mismos que ya retrasaron irresponsablemente la aprobación del presupuesto del presente año cuando fue presentado en el Pleno de la Corporación en diciembre del pasado año. El PP y CC votaron en contra de unas cuentas que tan dos meses después apoyarían con enmiendas que no superaban ni el 1% del total presupuestado.
No tuvieron ningún reparo entonces en utilizar como herramienta política el presupuesto del Cabildo a pesar de la necesidad que tenía Fuerteventura de contar con este documento operativo para afrontar la difícil situación social y económica de nuestra Isla como consecuencia de la pandemia por la Covid19. . Por su parte, el actual presidente, Sergio Lloret, entonces consejero del gobierno que presidía Blas Acosta no acudió “injustificadamente” a aquel Pleno para apoyar unas cuentas que contemplaban todas las demandas de su grupo político, pero que no llenaban su verdadera ambición: Con su deslealtad manifiesta provocó el cese fulminante como parte integrante del gobierno.
Tras aquella farsa todos sabemos lo qué ocurrió: CC y el PP aprovecharon aquella traición y se afanaron rápidamente para conformar una nueva mayoría que terminó por imponer su aritmética y constituir un nuevo gobierno en el Cabildo de Fuerteventura premiando al consejero desleal con la presidencia del Cabildo y competencias en cinco áreas de gobierno: Infraestructuras, Carreteras, Ordenación del Territorio, Gestión de Bienes, Cooperación Municipal y Servicios Generales.
Lo nunca visto que alguien con tan poco respaldo popular ostente la presidencia de la principal institución de Fuerteventura y también las competencias sobre áreas tan sensibles e importantes para nuestro presente y futuro. Y aún más sorprendente que esta situación haya sido consentida y apoyada por un partido como CC que ha gobernado nuestra Isla durante tres décadas y que pretende seguir gobernando.
Al margen de este despropósito, desde el PSC PSOE confiábamos en que la nueva mayoría había asumido con su voto unánime como propio el presupuesto presentado por los socialistas para la recuperación de nuestra Isla y con ello un proyecto de recuperación y proyección, con grandes inversiones en cuestiones esenciales y estratégicas y con una importante agenda social que sirviera de red para sostener nuestro tejido empresarial y para los ciudadanos más desfavorecidos.
Sin embargo después de meses de propaganda y muchas conspiraciones de Sergio Lloret, CC y PP, tras multitud de decisiones arbitrarias y comportamientos muy poco democráticos, se confirma que esta nueva mayoría no tiene en realidad ningún modelo de Isla ni proyecto, ni siquiera voluntad de resolver los problemas ni sacar los grandes temas adelante. Los componentes de este pacto, con su presidente a la cabeza, tan solo se afanan en seguir ellos en el poder a toda costa, contra todo y contra todos, sin darse cuenta que Fuerteventura necesita más que nunca un gobierno insular capaz, eficaz, solvente y con un liderazgo claro.
Los socialistas hacemos un llamamiento a todas las fuerzas políticas con representación en la Corporación, pero en especial a las que conforman este grupo de gobierno, para que evalúen con objetividad la situación real en la que se encuentra nuestra Isla y recapaciten de forma sincera, responsablemente y sin demagogia sobre lo que los ciudadanos esperan de quienes les representan y gobiernan las administraciones públicas.