El despropósito es de tal magnitud que podríamos encontrarnos este verano con el desvío y semienlace ya ejecutado por el Gobierno de Canarias y abierto al tránsito público pero enviando el tráfico hacia un camino rural que, siendo competencia del Cabildo Insular, sigue sin ser asfaltado ni acondicionado para soportar un tráfico constante de acceso a una autovía.
Se trata de otro ejemplo más de la indolencia con la que el presidente plenipotenciario, Sergio Lloret, afronta los proyectos importantes para Fuerteventura. Él, que es también el responsable insular de las Infraestructuras, las Carreteras, la Ordenación del Territorio, la gestión de bienes, la cooperación municipal y los servicios generales, todo con el consentimiento de CC y el PP.
Del presidente no esperamos mucho ya, y del PP tampoco, de manera que solo nos queda emplazar a los siete consejeros de CC a que hagan uso de su representación para imponer esta prioridad. Los ciudadanos se lo agradecerán.
El PSC PSOE recuerda al señor Lloret y a sus socios que ya conocían esta situación desde hace más de un año y medio, y que han tenido tiempo para salir en todas las fotografías de la obra de la autovía, pero no para proyectar y ejecutar el asfaltado de la conexión con el Parque Holandés, que es lo único de su competencia, y por tanto su verdadera responsabilidad y obligación.