La cifra media de deuda, para los casos que recurren a la Ley de Segunda Oportunidad es de unos 70.400 euros. “No hay una cifra concreta para el sobreendeudamiento, ya que depende de las circunstancias y gastos de cada caso. Una persona puede llegar a la insolvencia por una deuda de 14.000 euros, mientras otras personas acumulan cientos de miles de euros en el momento de declararse insolventes”.
En cuanto a la composición, más de un cuarto de la deuda que acumulan los hogares, el 28%, se debe a préstamos adquiridos que hay que devolver; un 15% a los intereses de las tarjetas de crédito y un 5% corresponde al pago de la hipoteca. Avales, otro tipo de financiación o deudas con proveedores constituyen también parte de esta deuda.
El perfil de deudor en Canarias
Aunque la mayoría de las personas que recurren a la Ley de Segunda Oportunidad son solteros, también hay un porcentaje significativo de personas casadas (21,2%) que tienen que recurrir a esta solución, mientras que cerca de un 15% son personas divorciadas o separadas.
Según Samuel Díaz “Es cierto que un divorcio o una separación suele implicar una serie de gastos imprevistos que pueden desestabilizar la situación económica personal y conducir a una espiral de deuda a causa de gastos como la manutención de los hijos, el pago en solitario del alquiler o la hipoteca, la devolución de préstamos que antes eran compartidos, etc.”
Además el informe revela que, en un 51% de los casos, las personas que recurren a esta ley no tienen hijos, mientras que un 49% sí los tiene.
En cuanto a la situación profesional, el 56% de los grandes deudores en Canarias son personas asalariadas, mientras que solo un 12,5% son desempleados que reciben alguna prestación o el 7,7% sin prestación. Esta situación de alta deuda también se da en otros perfiles como pensionistas (13,8%), autónomos (8,8) o amas de casa (7,7).
Ante una situación de gran deuda, los expertos de Canarias Sin Deuda aconsejan recurrir a un profesional que pueda analizar el caso y ver si es factible acogerse a la Ley de Segunda Oportunidad. Este es un procedimiento legal que permite cancelar deudas a personas físicas en situación de insolvencia. Aprobada en 2015, está pensada para que particulares y autónomos que no pueden hacer frente a sus obligaciones de pago eliminen total o parcialmente sus deudas y tengan la oportunidad de empezar de cero.