“El Partido Judicial de Puerto del Rosario continúa sufriendo la falta de personal y dotaciones materiales, y seguimos sin noticias del nuevo Palacio de Justicia”, denuncia el diputado del PSOE por Fuerteventura, Manuel Hernández.
Es especialmente relevante la carencia de psicólogos forenses, ya que es un elemento determinante en procesos de violencia de género, de divorcios contenciosos, de custodias de menores y de delitos violentos. A este respecto, destaca que “las pruebas preconstituidas con menores de edad, así como aquellas diligencias de valoración de verosimilitud de su testimonio, se retrasan y posponen durante largo tiempo, quedando los procedimientos paralizados y en muchas ocasiones, pendientes sólo de dicha diligencia”.
Que el trabajo del Partido Judicial de Puerto del Rosario continúe lastrado por la falta de perfiles profesionales clave en los procedimientos tiene consecuencias sobre su capacidad para administrar justicia en tiempo y forma, pero sobre todo afecta a las personas incursas en esos procedimientos, con singular daño a las víctimas. “La falta de psicólogos forenses puede causar retrasos en los juicios y prolongar las medidas de privación de libertad”. Lo mismo puede afirmarse de la ausencia de médicos forense con presencia permanente en Fuerteventura.
Otro de los problemas a los que se enfrenta, de forma recurrente, la justicia en Fuerteventura es la tardanza en cubrir bajas de larga duración. De media, más de un mes sin cubrirse cada baja. “Es un tiempo desmesurado que lastra aún más la capacidad de resolver litigios”.
El pasillo del supermercado
La dispersión geográfica de las sedes judiciales en Fuerteventura, con tres sedes distintas, dificulta la interacción entre los Juzgados. En algunos, como en la sede de Majada Marcial, el esperpento es superlativo: el edificio es un centro comercial en el que también hay un supermercado y sus clientes se mezclan en los pasillos con los justiciables que acuden a los actos judiciales (y sin arco de seguridad). “En mitad de este despropósito, el tan anunciado nuevo Palacio de Justicia es hoy una utopía”, resalta el diputado socialista.
El problema de la dispersión de las sedes judiciales y la extensa geografía a la que da servicio el Partido Judicial de Puerto del Rosario tiene otro hándicap difícil de explicar por parte del Gobierno de Canarias, que destina un único vehículo para todas las gestiones.
“Cuando un gestor público entra en la dinámica de anunciar acciones que no cumple se convierte en una fábrica de bulos y es parte del problema”, concluye Manuel Hernández.