La diputada del Grupo Nacionalista Canario (CCa), Natalia Évora Soto, intervino en la Comisión de Educación, para trasladar al consejero del Área, Poli Suárez, la creciente preocupación de las familias y el equipo directivo así como los docentes del CEIP Gran Tarajal, respecto a los retrasos de las obras en el centro escolar que “ya deberían estar finalizadas”.
Dichas obras deberían haber concluido el pasado mes de febrero, sin embargo, fueron prorrogadas hasta mayo. “Ahora, hemos llegado a junio y siguen sin terminar”, añadió Évora. Según comunicó la diputada majorera, tanto las familias como el equipo directivo han mostrado su molestia debido a la falta de baños para el alumnado.
Además, Natalia Évora incidió en el hecho de que las obras se realizan en horario lectivo, generando ruidos y polvo, así como también impiden el uso de espacios de sombra y generan problemas con la limpieza del centro. Esto último ha provocado que el Ayuntamiento de Tuineje haya tenido que aumentar el personal.
Por todo ello, la parlamentaria del Grupo Nacionalista Canario por Fuerteventura, se interesó por la previsión para la reanudación de las obras pendientes y su consecuente culminación. En este sentido, Natalia Évora insistió en la posibilidad de aprovechar las vacaciones de verano del alumnado para comenzar las obras y culminar las actuaciones pendientes en este centro escolar, de manera que “no llegue septiembre y se vuelvan a producir las mismas problemáticas”.
Por otro lado, la diputada también se interesó por el inicio de las obras de la antigua residencia de estudiantes de Gran Tarajal. “Se trata de una actuación de gran importancia para la zona”, determinó Évora. Asimismo, insistió en que cuando se realice el pliego de dicha ejecución, se especifique que las obras deben realizarse fuera del horario lectivo, ya que “a las familias les sigue preocupando que el alumnado vuelva a tener otro curso escolar soportando obras interminables”, concluyó Évora.
Por su parte, el consejero Poli Suárez, afirmó que “se va a rescindir el contrato a la empresa adjudicataria de las obras y aplicar las penalizaciones correspondientes”. Según Suárez, se trata de un expediente que ya se ha iniciado, y planteó valorar la posibilidad jurídica de emitir un informe que inhabilite a la empresa adjudicataria “que es la que ha fallado”, para presentarse a licitaciones públicas. El consejero de Educación insistió en que se va a priorizar la puesta en marcha de los baños “como parte fundamental de la obra” y que el resto de obras que queda pendiente se lleve a cabo por la vía ordinaria, una vez rescindido el contrato con la empresa adjudicataria.