Fue en 1812 cuando este antiguo almacén de la calle La Marina, hoy denominada calle García Hernández, abrió sus puertas al culto tras la solicitud por parte de los comerciantes Diego Miller y Cristóbal Molina al Obispado. El pasado año 2012 se cumplía el bicentenario de esta ermita que forma parte del casco viejo del antiguo Puerto Cabras, y en su interior aún se conservan los techos de madera y un arco de medio punto en cantería.
Esta actuación, impulsada por la Concejalía de Cultura del Ayuntamiento capitalino que dirige Juan Manuel Verdugo, viene a preservar la memoria colectiva y el legado histórico del municipio tras haber servido de depositario de la primera imagen de la patrona, la Virgen del Rosario y patrona de la capital.